En esta etapa de la vida es fundamental alimentarse bien, las largas jornadas de clases, la escasez de tiempo libre, el presupuesto limitado, el desconocimiento de las prácticas culinarias y de selección de alimentos, son factores que inciden en los hábitos alimentarios.
La alimentación del estudiante universitario suele ser monótona, con ausencia de variedad y equilibrio en la selección de alimentos, desordenada y con una tendencia a pasar por alto las comidas. Se observa un alto consumo de comidas rápidas, ricas grasas, hidratos de carbono, azúcares, sodio y un bajo consumo de lácteos, frutas y verduras. Por otro lado, se advierte que muchos de los estudiantes tienden a disminuir la actividad física, aumentan el consumo de alcohol, cigarrillo y bebidas energizantes.
Una adecuada alimentación no sólo influye en el rendimiento académico, sino también en otros factores como evitar el agotamiento y cansancio, si no se consumen los nutrientes necesarios es difícil mantener el ánimo y las ganas de estudiar, trabajar, hacer ejercicio físico.
Por otro lado, el exceso de comidas tampoco es una práctica recomendable ya que induce al sobrepeso y podría provocar otras enfermedades tales como sobrepeso y obesidad. Por ello, es necesario asegurar un adecuado aporte de calorías y nutrientes para evitar deficiencias o excesos que puedan ocasionar trastornos de la salud.
Es muy importante informarse para saber elegir los alimentos que garanticen una alimentación suficiente y equilibrada, y aprender a organizar las comidas del día. Además, es fundamental tener en cuenta aquellas situaciones que puedan afectar al estudiante e impliquen modificar sus hábitos alimenticios.
Es imposible establecer una regla general para aplicar en la nutrición de los estudiantes, pero sí dar una serie de pautas para llevar una alimentación variada y balanceada. En la edad universitaria, al haber culminado el proceso de crecimiento, el aporte nutritivo debe ser adecuado para su edad y la actividad que realice.
Poder alcanzar fácilmente los alimentos saludables en las universidades a un costo accesible es un gran desafío, ya que se observa que buffets y kioscos universitarios ofrecen una gran variedad de alimentos de menor costo, ricos en grasas saturadas, azúcares, sodio. Los famosos “fast food” o comida rápida, que son alimentos que aportan una cantidad exagerada de calorías obtenidas de los hidratos de carbono simples y grasas saturadas, son los alimentos más elegidos por los estudiantes, debido al poco tiempo que tienen para comer, el costo del mismo y muchas veces por el estrés que llama a comer alimentos de este tipo por ansiedad.
Algunos Consejos
- Comer tranquilo y masticar correctamente.
- No descuidar las horas adecuadas de sueño.
- Descanso adecuado.
- Beber agua, jugos de frutas exprimidos e infusiones con poca azúcar.
- Evitar las bebidas alcohólicas y el cigarrillo.
- Evitar saltear el desayuno.
- Evitar comidas abundantes a la noche.
- Consumir frutas frescas, verduras y frutos secos.
- Disminuir el consumo de golosinas, galletitas y comida chatarra.
- Elegir carnes magras, y no olvidar el consumo de lácteos.
- Planificar las comidas del día.
- No consumir en exceso bebidas excitantes como café, té, gaseosas u otro tipo de bebidas estimulantes.
- No realizar dietas sin criterio nutricional.
- Realizar una alimentación bien equilibrada, que incluya alimentos de todos los grupos consumidos a diario, para cubrir todas las necesidades de energía y nutrientes, sin necesidad de recurrir a ningún tipo de suplemento.